Cuando ya tienes todo tu proyecto preparado, tras las largas horas y jornadas de trabajo dedicadas, llega el momento de mandarlo a tu imprenta editorial para verlo por fin entre tus manos. Te encanta cómo ha quedado, está perfecto, tal y como esperabas… Así que más vale hacer una buena preparación para imprenta y evitar así errores que pueden arruinar el resultado final.

El diseñador que se encarga del arte final debe hacer una revisión del documento para comprobar que todo está perfecto y que nuestro proyecto será como lo tenemos en mente. A continuación vamos a enumerar los fallos más frecuentes de los trabajos que recibimos, que, por suerte, tienen muy fácil solución si prestamos atención a resolverlos:

Revisión de los textos

La base de un buen trabajo es una correcta ortografía, gramática, puntuación y sintaxis. Aunque tengas un buen diseño y un excelente acabado, la pieza pierde toda su fuerza si de repente te encuentras con un error tan básico como este. Es necesario que un experto haga una revisión en profundidad de los textos y corrija todos los fallos, que (créenos) es muy probable que los haya. Te sorprenderías al saber la cantidad de documentos que recibimos con este tipo de errores en nuestra imprenta editorial.

Sangrado de las páginas

Es, junto con el primero, uno de los fallos más frecuentes. Recuerda que, cuando prepares el archivo para enviar a tu imprenta editorial, todos los elementos que forman parte del diseño deben llevar aplicados unos milímetros de sangre. Tener esto en cuenta es de vital importancia, ya que si no se pueden generar malos acabados al aplicar la guillotina y quedarse espacios en blanco.

Correcta gestión del color

El color debe estar bien configurado y preparado para el tipo de impresión con el que se van a producir las piezas: por ejemplo, no es lo mismo desarrollar un diseño para impresión rotativa que para offset. Por tanto, antes de mandar a tu imprenta editorial, comprueba que las imágenes en CMYK y los Pantone están correctos. Así te asegurarás que los colores que verás en papel son los mismos que están en el diseño.

Tipografías trazadas o incrustadas

Otro de los problemas que se suelen dar cuando recibimos el diseño de un cliente es que las tipografías no están correctamente preparadas. Para evitarlo, antes de enviar a imprenta el documento asegúrate de están trazadas o incrustadas en el documento, cualquiera de las dos opciones es válida. De otra forma, las tipografías pueden alterarse y aparecer erróneamente, afectando al diseño original.

Tamaño de la pieza final

A veces no está de más imprimir una maqueta para comprobar que el diseño es válido. Por ejemplo: ¿se ven bien las formas? ¿Se entienden las imágenes? ¿El tamaño de la letra tiene buena legibilidad? A veces, si la pieza es de grandes dimensiones, es difícil apreciar el formato y las proporciones. Haz una prueba para cerciorarte de que está quedando como querías.

Orientación del documento

No siempre es sencillo averiguar lo que busca el cliente en su trabajo final, por eso, no des nada por hecho y haz todas las especificaciones que necesite la imprenta editorial para que el trabajo salga correctamente. Algo que puede parecer tan básico como la orientación de las páginas a veces puede generar problemas, ya que el cliente buscaba un diseño especial o fuera de lo común. Una flecha indicando el sentido de las páginas será suficiente en la mayoría de los casos. Si es más complejo que esto, también puedes crear una maqueta con el resultado final que esperas obtener.

Acabados especiales

Enviar un diseño con acabados especiales, tales como troqueles, tintas especiales –metálicas, flúor-, signado, etc. requiere hacer una preparación previa. Además, cada imprenta editorial tiene sus propios requerimientos: algunas prefieren que se envíen en documentos separados, otras que vaya todo junto en el mismo… Por eso, lo mejor será que nos pongamos en contacto para que nos cuentes qué es lo que tienes en mente, así podremos orientarte sobre cómo preparar tu esquema.

Estos son los errores más frecuentes que nos encontramos en nuestra imprenta editorial cuando recibimos los trabajos de nuestros clientes. Siguiendo estas sencillas indicaciones conseguirás un trabajo más profesional y unos acabados acordes con tu idea original. Si necesitas un trabajo de imprenta editorial, solicítanos presupuesto y te haremos una oferta adaptada a tus necesidades.